Aunque aún falta por contar, todo parece indicar que serán cuatro de Apruebo Dignidad, dos del oficialismo y uno del Partido Republicano los Diputados que entrarán al Congreso representando al Distrito 9 (Renca, Conchalí, Huechuraba, Recoleta, Independencia, Cerro Navia, Quinta Normal y Lo Prado). Si bien en el caso de Cariola, Durán y Orsini sus reelecciones eran casi un hecho, la distribución de los escaños restantes no estuvo exenta de sorpresas.
Pese a que había altas expectativas de su eventual votación, el Humanista Pablo Maltés sólo consiguió un 4.6% de las preferencias del Distrito 9. El asesor y pareja de Pamela Jiles, que además fue fallido postulante a Gobernador Regional no logró capitalizar la exposición mediática en la tramitación de los retiros del 10%, donde tomó un interesado protagonismo.
Por su parte, la actual Diputada del Distrito 10, que buscaba mudarse como representante del D9 Natalia Castillo no logró trasladar la votación récord del alcalde de Renca Claudio Castro, quedando desplazada a la 21va posición. La Independiente por el Partido Liberal cosechó un magro 2.39% de los votos y, debido a que la lista tampoco sumó la votación necesaria, quedó virtualmente fuera del Congreso.
La abogada y ex-integrante del Frente Amplio había recibido un apoyo cerrado del edil de la comuna, con quien se desplegó ampliamente. La cercanía entre ambos llegó hasta el punto de promover a Castillo como una suerte de «Diputada para Renca», entendiendo que de tener posibilidades, su elección dependía de los votos que pudiera obtener en Renca.
Tras un pobre desempeño de la lista Nuevo Pacto Social, la banca que ocupaba la PPD Cristina Girardi cambio de manos y pasó al representante del Partido Republicano José Meza. En total, las cartas del Frente Social Cristiano recogieron cerca del 10,5% de las preferencias, suficientes para asegurar uno de los 15 asientos en la cámara que tendrá el pacto encabezado por José Antonio Kast en la siguiente legislatura.